Recorre las redes sociales el chisme de que en materia de
participación política las Farc habrían pedido 30 curules, 15 en Senado y 15 en la Cámara, y que en un supuesto desliz, al Ministro Carrillo se le habría salido
la infidencia de que en La Habana el Gobierno ofreció 10, 5 en Senado y 5 en la Cámara.
Aunque ha quedado visto que de este Gobierno cualquier
desfachatez es posible, esos supuestos "deslices" son el típico
recurso político de "soltar una bomba", de mera salva, simplemente
para medir el grado de aceptación o rechazo que pueda tener una iniciativa en
tal o cual sentido. De ahí que el mismo Carrillo no lo confirme ni lo
desmienta. Hará lo último cuando ya haya recogido evidencia del sentir
nacional.
Por eso me permito jugar el papel del estúpido contestando a
la bomba de salva.
Que las Farc pidan 30 curules no debería extrañar a nadie.
Si no son victimarios, secuestradores ni narcotraficantes podrían inclusive
pedir 270 y eso sería normal. León Valencia lo celebraría diciendo que
"para eso es la negociación". Pero que el Gobierno ofrezca 10, 5 en
Senado y 5 en Cámara, merece los siguientes comentarios:
1. La circunscripción nacional especial que hoy existe garantiza
con 5 curules en Cámara la representación política de: negritudes (2),
indígenas (1), minorías políticas (1) y
colombianos en el exterior (1). Todos ellos, considerados minorías, reúnen millones
de colombianos y en total tienen solamente 5 curules en el Congreso. ¿Puede creer el
Gobierno que los representantes de 10,000 terroristas
tengan igual o superior participación política que los millones de colombianos que
conforman las minorías étnicas, indígenas y políticas de este país? ¿Qué parte
del concepto democracia maneja en La Habana?
2. Los Verdes y el Polo Democrático Alternativo están viendo en
riesgo su supervivencia como partidos políticos a tal punto que los primeros
preparan un proyecto de Acto Legislativo para modificar la actual circunscripción
territorial en un intento por no desaparecer en las próximas elecciones
parlamentarias. ¿Cree el Gobierno que mientras hay partidos que pueden desaparecer
por no alcanzar el 3% de la votación, el país político se va a tragar el sapo
de 10 congresistas narco guerrilleros?
3. No obstante el Marco Jurídico para la Paz, una nueva
circunscripción especial requeriría de modificación constitucional para la cual
la ley estatutaria no alcanza. Se necesitaría de los varias veces mencionados
mecanismos de refrendación. No existe la menor posibilidad de que el país
nacional avale una propuesta en ese sentido.
¿Y si el país no pasaría una propuesta en ese sentido, el
Gobierno para qué la explora? Para poder justificarse frente a las Farc y al
mundo en su intento por “alcanzar la paz”, y luego lavarse las manos culpando al país nacional del fracaso histórico que han sido y serán los diálogos
de La Habana.